noviembre 26, 2019

La rebelión popular en Chile no solo es ahora¡¡: Las jornadas de protesta en 1983-1984.











Claudio Palma A. Licenciado en Historia UAHC.


                                                               ANTECEDENTES


Los antecedentes mas próximos a las protestas que tuvieron lugar en Chile durante octubre del 2019, se deben buscar durante la dictadura de Augusto Pinochet, ya que entre los años 1983 y 1984 tuvieron lugar las doce protestas mas grandes de la historia de Chile, bajo un ambiente de represión y en la mayoría de los casos bajo estado de sitio.

Para entender las diferencias y similitudes con las protestas de la actualidad en Chile, este articulo busca explicar las claves que originaron esas protestas desde una perspectiva histórica, además de señalar su cronología.

El contexto nacional en el cual surgen las protestas, se caracterizo por una profunda crisis económica, que genero una caída de 14 puntos en el producto interno bruto nacional, lo que llevo al gobierno militar a abandonar, por primera vez desde que estaba en el poder, la ortodoxia económica neoliberal impuesta por los Chicago Boys. Esta grave situación económica implico que el gobierno interviniera la economía, en especial la banca, contraviniendo los dictados de los teóricos del libre mercado.

Además de la situación económica, inciden en la génesis de las protestas el inmovilismo político del régimen, una división creciente al interior de los partidarios del gobierno que termina en un cambio masivo de gabinete que desplaza a los Chicago Boys. A esto se debe agregar un creciente descontento hacia las políticas de represión de la dictadura, destinadas a la represión política y a la atomización social.

Aunque la primera gran protesta nacional se realiza de manera espontanea en mayo de 1983, es convocada principalmente por la Confederación de Trabajadores del Cobre CTC. Ante la grave crisis económica los trabajadores del cobre habían realizado un llamando a huelga. Pero dada la posibilidad de fracasar llaman a la población a manifestar su descontento en las calles. El llamado propone una serie de acciones que pueden realizarse de manera individual, en pequeños grupos o de forma masiva, como no mandar a los niños a clase, no realizar compras, hacer reuniones en los lugares de trabajo o hacer ruido con las cacerolas a partir de la tarde. El éxito de la primera protesta en inmenso y supera las expectativas tanto del régimen como de la oposición.

Las movilizaciones contra la dictadura, tuvieron varios factores que les dieron un carácter inédito: pese a desarrollarse en un ambiente de represión y bajo estado de sitio, fueron las mas grandes de la historia de Chile y obligaron al régimen a abandonar su primera etapa de represión masiva y a dar paso a una etapa de apertura política.

Las protestas de 1983-84 unieron a dos sectores que no tenían vinculo social alguno hasta ese entonces: el proletariado industrial representado por los trabajadores del cobre principalmente y el llamado lumpen-proletariado(1) representado por los jóvenes pobladores de los barrios marginales de Santiago y regiones, sector social que no tenia ninguna experiencia en algún tipo de trabajo asalariado a diferencia de los trabajadores de los influyentes sindicatos mineros, que además estaban lejos de las urbes como Santiago.

Las doce jornadas de protesta tuvieron características diferentes, pero estuvieron unidas por un motivo casi idéntico: manifestarse por la grave situación económica del país y exigir la renuncia de Pinochet y el fin del régimen.

Las protestas siguieron un siglo que puede dividirse en tres etapas, tomado como diferenciación de las faces, las tácticas que adopto el régimen y sus consecuencias políticas y económicas:

Primera etapa-(mayo de 1983-septiembre de 1983): Fue la etapa mas intensa y masiva de la protesta. Aunque surgió de manera espontanea por la grave crisis económica vivía el país, fue en este periodo donde participaron los principales actores sociales y políticos del momento: La confederación de trabajadores del cobre (CTC), los jóvenes y pobladores, los sectores populares y la clase media. Desde el sector político, se crea la Alianza democrática, AD-(futura concertación)- integrada por la Democracia Cristiana y el bloque socialista-(vinculado la socialismo renovado)- y el Movimiento Democrático Popular, MDP, vinculado la partido comunista y la MIR, quienes también participan de la protesta. El régimen responde con una represión masiva antes durante y después de las protestas comprendidas en este periodo, donde la clase media fue reprimida de manera menos brutal que los sectores populares. Esta táctica de la dictadura para intentar dividir a los actores de las movilizaciones, no surte efectos y la protesta adquiere carácter nacional.

Segunda etapa-(octubre de 1983-marzo de 1984): Durante este periodo baja la participación de la clase media y la confederación de trabajadores del cobre se baja de la protesta, así como también la Alianza Democrática . El régimen logra disminuir la participación en las protestas y estas solo se concentran en sectores populares. La dictadura abre un espacio de participación política informal y negocia con el sector de la oposición que no participa en las movilizaciones. Presta juramento un nuevo gabinete en el que vuelve al gobierno la derecha tradicional y se promete el diseño de un itinerario para la transición a la democracia. Pero solo se trata de una maniobra del gobierno para ganar tiempo, lo que provoca la reactivación de las protestas, de desarrollo combinado de todas las formas de lucha; pacificas, violentas y de llamados a desobediencia civil y paros sectoriales.

Tercera etapa-(abril de 1984-noviembre de 1984): Después de hacer una aparente concesión política el régimen hará una aparente concesión económica. Esta vez los cambios se concentraran en los ministerios vinculados al sector económico, donde serán designados los primeros ministros que no adhieren al dogmatismo neoliberal. Si en la etapa anterior el gobierno se había abierto al sector político en esta se abrió a negociar con el sector productivo de las clases medias: pequeños empresarios transportistas, el comercio etc. La nueva orientación económica crea esperanzas en los sectores medios que nuevamente se bajan de la protesta. Por lo tanto las movilizaciones se centran en los sectores populares. Dentro de esta etapa, los meses de septiembre y octubre fueron los mas intensos: en este lapso la protesta adquirió carácter nacional y por primera vez logro la paralización parcial del país, a lo que la dictadura respondió decretando el estado de sitio el 6 de noviembre.









                                                         
                                                             ESCENARIO PREVIO

Desde la llegada al poder de la junta militar en 1973, quedo claro que el nuevo gobierno perseguía una reestructuración de la economía en torno a los sector financiero y exportador. Con ese objetivo, el 11 de Septiembre de 1980, se aprueba una nueva constitución en un plebiscito, donde Pinochet y la junta buscaban legitimidad a su proyecto de refundación, y de hecho dejar en claro que significaba exactamente esto, una refundación, no una restauración de la democracia anterior a 1973. Con la celebración de este plebiscito el règimen se invistió de legitimidad política, lo que le permitió iniciar oficialmente el itinerario de transición hacia la democracia protegida.

Sin embargo ,como se menciono antes, el objetivo de los militares no era una restauración del orden anterior, sino una refundación político económica del paìs y para eso debían realizar un profundo programa de reestructuración económica que legitimara al gobierno militar tanto en el paìs como en el extranjero.

Para esto los militares depositaron su confianza en un grupo de asesores que prometía asegurar crecimiento económico y que permitiría a su vez reestructurar la economía chilena y refundar la sociedad a fin de sentar las bases de una nueva institucionalidad. Se planteo así la combinación de autoritarismo político y liberalismo económico producto de la estrecha alianza que existía entre el gremialismo de Jaime Guzmán y Sergio Fernández y los economistas de la Universidad Católica encabezados por Sergio de Castro y Miguel Kast. Sin embargo la influencia de estos economistas al interior de la junta militar no fue un camino pavimentado, ya que al inicio del golpe el proyecto ortodoxo no tenia por que ser el único. Es evidente que ciertos rasgos de la economía chilena-(paìs pequeño, de mercado reducido, con precario desarrollo de su base industrial)-, así como también las nuevas reglas del capitalismo a nivel mundial, condicionaban el rango de las alternativas viables. Pero no por ello puede afirmarse que existía una sola vía de desarrollo capitalista, y que tanto el camino-(la dirección tomada)-como el recorrido-(los ritmos adoptados)-estuvieran inexorablemente determinados.

Estaba claro para el gobierno militar, desde su llegada al poder en 1973, que la política económica que se debían instalar era una economía capitalista, bajo nuevas formas, no comparables a las que se venían realizando desde 1938. Estaba claro desde un inicio que se debían liberar la fijación de precios a las fuerzas del mercado y redefinir el rol del estado y del sector privado, donde el primero debía tener un radio mínimo de acción en la economía y el segundo un rol dominante. Si bien era cierto que dentro de la junta y su equipo, nadie era estatista, no era menos cierto que los sectores ortodoxos, en especial los Chicago Boys, no tenían una presencia protagónica en el equipo económico del nuevo gobierno. Los civiles que integraban los ministerios de economía del gobierno militar, estaban vinculados a las elites empresariales pero eran "gradualistas", a diferencia de los ortodoxos, como fue el caso del ministro de economía Fernando Lèniz, cercano a José Toribio Merino, ministro de economía que asume en octubre de 1973. El equipo de Lèniz tenia un proyecto mas gradualista pero sobre todo, este proyecto no contemplaba el desplazamiento de la industria como sector líder de la economía chilena, sino solo su modernización, es decir se planteaba una reestructuración del sector industrial acotándolo a una gama limitada de productos capaces de competir en el mercado internacional, mas que a un sector industrial grande y orientado la mercado interno como ocurría con el modelo de sustitución de importaciones-(ISI)-, este modelo de desarrollo capitalista también contemplaba las rebajas arancelarias, pero de forma gradual, con miras a darle tiempo la sector industrial para adaptarse a las condiciones competitivas en el mercado internacional. Se podría afirmar que este proyecto de industrialización menos diversificada, pero mas eficiente, apuntaba en líneas generales a seguir el modelo capitalista que había emprendido Corea del Sur en la década de los sesenta, y que en el caso de Chile, habría sido un modelo de continuidad y ruptura; continuidad por que el sector industrial no seria desplazado como motor de la economía, y de ruptura por que como pocas veces ese sector competería en el mercado internacional lo que llevaría de todas maneras a una rebaja arancelaria generalizada(2).

En abril de 1975, la junta militar desplaza a Fernando Lèniz del ministerio de economía, y opta por el proyecto de libre mercado ortodoxo, propuesto por los Chicago Boys. Sin duda que existen factores externos para explicar por que la junta militar se decanta por el modelo ortodoxo, como el hecho de que el mundo vivía una reconfiguración del capitalismo derivado de la crisis mundial de principios de la década de los setenta, con lo cual ya no era deseable la industrialización en los paìses de la periferia. Pero si hay que buscar factores internos para explicarse la elección de Pinochet y la junta por le modelo neoliberal, jugaron un papel clave el ministro de economía Sergio de Castro y el ministro de desarrollo social-(ODEPLAN)-, Miguel Kast, cuya labor ideológica fue clave para persuadir a los altos mandos y mandos medios, tanto civiles como militares para adoptar el modelo de libre mercado puro.

De esta forma, a partir de 1975 se implantaron una serie de medidas económicas que transformaron a Chile en un laboratorio de la ideas económicas de libre mercado puro propugnadas por Milton Friedman. Los Chicago Boys trasformaron de manera radical la economía estatista, regulada y basada en la sustitución de importaciones en una economía exportadora de libre mercado. A diferencia de Fernando Lèniz, el equipo liderado por De Castro y Kast, retiro a Chile del pacto andino-(instancia donde se definían de común acuerdo con los paìses de la costa pacifica la fijación de aranceles)-con lo cual las barreras a las importaciones y al libre comercio bajaron con una velocidad e intensidad nunca antes vistas y se sometió a la economía chilena a los rigores de una dura competencia interna y externa, al tiempo que se reducía el rol del estado y aumentaba del papel del mercado como asignador de recursos. A la desregulación del libre comercio y la privatización del sector financiero y bancario, siguió la liberalización de la cuenta de capitales, lo que significo la desaparición de todas las restricciones y regulaciones a las operaciones de intermediación financiera internacional realizadas por los bancos.

Hacia finales de la década del setenta la economía chilena había alcanzado algunos logros. Muchos indicadores económicos se presentaban favorables; se registraban tasas de crecimiento constantes y favorables, niveles adecuados de salarios y de exportaciones no tradicionales.

Sin embargo el paulatino empeoramiento de la balanza comercial, la caída de los niveles de ahorro interno, la sobrevaluación del peso y la decreciente competitividad internacional por la caída de las exportaciones no fueron consideras en la ultima mitad de la década de los setenta y se transformarían en los gatillantes de la crisis en la primera mitad de la década de los ochenta.

Pese a esto el equipo económico encabezado por Sergio De Castro profundizó las medidas liberalizadoras a niveles inéditos, privatizando la seguridad social y el sector salud, así como la descentralización administrativa del estado y la elaboración de un código laboral que restringía severamente la organización sindical. Respecto a este ultimo punto hay que hacer notar que todos los gobiernos militares que se impusieron en la década de los setenta en el cono sur prohibieron o restringieron severamente la actividad sindical, así como a los partidos de izquierda ligados a ella, medida clave si lo que se perseguía en esa fase de reestructuración capitalista era dinamizar al sector privado y asegurar una subida en la tasa de ganancia. Sin embargo estas medidas en el caso chileno significaron una apertura al exterior rápida y drástica que sepultó la economía basada en el estado intervencionista.

De esta manera Chile vivió un boom económico en la ultima mitad de la década de los setenta capitaneado por los productos importados. Sin embargo este boom económico fue financiado por el endeudamiento externo, dado que la tesis oficial del equipo económico postulaba que toda obligación externa era buena, por que reflejaba en estado saludable de la economía. El milagro económico se vio reflejado en los índices macroeconómicos, pero el resultado de este "milagro" no fue el mismo en lo social. El empeoramiento de las condiciones de vida en las clases populares y el incremento del desempleo fueron constantes. Estos niveles de cesantía redujeron a la clase obrera en numero y peso en el aparato productivo, generando una masa de desempleados que desarrollo múltiples estrategias de sobrevivencia, este ultimo aspecto es clave para este análisis.

Este panorama general permite explicar por que cuando estallo la crisis económica se produjo una movilización social de tal magnitud que obligaría al règimen a hacer algunas concesiones. No solo los sectores opositores al gobierno militar se levantaron en su contra, sino también muchos sectores que habían apoyado el golpe como los empresarios, los gremios y las clases medias. Esto provoco que la crisis se trasformara en una agitación social a gran escala.

En 1981 estallo a nivel mundial una crisis económica de gran magnitud, que golpeo a una economía chilena altamente vulnerable producto de su excesivo endeudamiento. En 1982 se produjo una drástica reducción del crédito externo y los precios del cobre se habían deprimido. La crisis en Chile se desarrollo con rapidez. En 1981 el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos era un 20% mayor que las exportaciones y alcanzaba el 15% del PNB. La banca internacional, ante esto, subió las tasa de interés y hubo una drástica disminución de los prestamos internacionales hacia Chile. Todo esto se expresò en una serie de quiebras de empresas. De las casi 431 firmas que  se liquidaron-(cifra récord)- la mas importante fue la azucarera CRAV, una de las empresas mas grandes de Chile.

Fue entre 1983 y 1984 que las necesidades de la crisis obligaron la gobierno a alejarse del liberalismo extremo puesto en practica por los Chicago Boys entre 1974-75 y 1981. Después de casi diez años de règimen militar el estado volvía a intervenir en la economía. En 1983 las quiebras alcanzaron un numero sin precedentes y el desempleo subió a un 30% a finales de ese año. La inflación subió de un 9,5% en 1981 a un 23,1% en 1983. Además los conglomerados económicos no podían seguir reprogramando sus deudas ante la subida de las tasas de interés.

Esto provoco, como se señalo antes, que la junta decidiera por primera vez desde que asumiera el poder, hacer que el estado interviniera en la economía. Primero se determino una gasto fiscal expansivo con miras a financiar obras publicas, además por primera vez desde 1975 subieron los aranceles para 240 productos importados, se devaluó el peso en un 24%, se subieron los aranceles a una tasa pareja del 35% y se estableció una suspensión de las rebajas tributarias previstas para 1985. A su vez en 1983 se decidió la intervención estatal o la disolución de las principales instituciones financieras, propiedad de los grandes grupos económicos. Con esto el estado se convirtió en propietario del 80% del sistema financiero privado, y junto con ello adquirió el control indirecto de las principales firmas que eran acreedoras. Estos cambios sentaron las bases de un liberalismo mas pragmático y moderado que comenzó a dar frutos en 1985, cuando se empezó a observar una recuperación económica. De ese año en adelante el modelo ortodoxo no se aplicara mas, aun cuando la banca se reprivatizo con el retroceso de la crisis. Dado este escenario de grave crisis económica y recuperaciones parciales muchos sectores entraron y salieron de las protestas.









                                              DESARROLLO DE LAS PROTESTAS

El ritmo de desarrollo del ciclo de protestas puede ser periodizado en dos etapas, basándose en el alcance y magnitud que estas alcanzaron: una de ebullición y otra de repliegue. La primera etapa abarco entre mayo de 1983 y octubre de 1984, durante el clímax de la crisis económica y por lo tanto conto con una participación mayoritaria de los actores sociales. La segunda entre septiembre de 1985 y julio de 1986, en la coyuntura de una incipiente recuperación económica que provoco la bajada de muchos actores entre ellos la mayoría de la clase media y parte de comercio, aun cuando se torno mas selectiva y con un intento de paro nacional, tal vez el mas serio de la década, aun así, desde 1985 la protesta tendió a concentrarse en los sectores populares(3).

Otro factor clave en las protestas fue la reaparición de la política y los sindicatos aunque en una versión distinta a la de antes de 1973, ya que bajo estado de excepción gran parte de las organizaciones revolucionarias con una estructura de carácter vertical fueron rápidamente desarticuladas y sus dirigentes, muertos o desaparecidos, ya que la implementación de la operación cóndor y la "doctrina del enemigo interno" estaba dirigida precisamente a exterminar a grupos de guerrilla urbana y a partidos de izquierda con conexión con el movimiento sindical. En efecto la doctrina del enemigo interno era efectiva para desbaratar organizaciones de estructura vertical de mando, pero no estaba preparada para acabar con movilizaciones masivas de carácter "horizontal" como las protestas.

Es así que en julio de 1983 en el marco de la tercera protesta intervienen por primera vez los partidos políticos. La fuerte represión ejercida sobre el mundo sindical, tanto política como a través de despidos masivos, así como la detención de Rodolfo Seguel, destacado dirigente del sector minero, explican el segundo plano que fue ocupando el mundo sindical en las protestas de manera paulatina.

Así, la protestas quedaron mayoritariamente en manos de los partidos políticos. En agosto de 1983, se funda la Alianza Democrática (AD), conformada por la democracia cristiana, la derecha republicana, la socialdemocracia, y sectores del partido socialista pertenecientes al "socialismo renovado", liderados por Carlos Briones-(PS-Núñez desde 1986)-, y el partido radical. Aunque siempre se argumenta que la AD, fue la matriz política de donde se formo la Concertación de Partidos por la Democracia, su programa demostró ser mucho mas ambicioso que el programa al que después adoptaría la concertación en el gobierno. La AD tenia tres puntos programáticos fuertes: 1)-Buscar un acuerdo nacional, para una nueva constitución; 2)-La renuncia de Pinochet a la presidencia; 3)-Se proponía la formación de un gobierno provisional y elecciones libres.

Durante ese mismo año, en septiembre se formo el Movimiento Democrático Popular (MDP), constituido por el Partido Comunista, la corriente del Partido Socialista representada por Clodomiro Almeida y el MIR. Su programa era mucho mas radical que el de la AD, ya que su columna programática postulaba una democracia popular y postulaba que todas las formas de lucha eran validas, incluida la vía armada. Entender este punto es clave ya que al igual que los socialistas, el PC también estaba en un proceso de renovación interna. Sin embargo mientras el PS se renovaba para dejar las tesis clásicas del marxismo-leninismo y virar a posturas socialdemócratas, la renovación del PC lo llevo a poner en cuestionamiento el estalinismo de los socialismos reales y su propia "vía institucional", para adherir por primera vez a la lucha armada. Pero la decisión del comité central de PC en la Alemania Oriental (RDA), iba mucho mas allá: no solo querían alejarse de sus directrices en La URSS, sino además del marxismo clásico y hasta incluso la las teorías de mas renombre sobre la guerra de guerrillas, como las propugnadas por el che Guevara, donde la revoluciòn era un asunto del foco guerrillero desarrollado por especialistas. En el caso de la Política de Rebelión Popular de Masas (PRPM) desarrollada por el PC, el centro de la lucha no eran los revolucionarios profesionales sino las masas populares, a las que la lucha armada serviría como "un apoyo mas". Para llevar a la practica su "renovación" el PC debió abandonar los modelos revolucionarios clásicos de los paìses socialistas y mirar hacia otras experiencias como por ejemplo la revoluciòn de los cláveles en Portugal donde se obtuvo una salida democrática vía insurrección armada y fractura de las FF.AA. Por otra parte como ocurrió con el golpe de los capitanes en abril del 1974 y donde el PC portugués de Álvaro Cunhal tuvo un gran protagonismo. Se tuvo contacto también con la experiencia de la revoluciòn en Irán, donde gigantescos paros en el sector productivo, la salud y la educación, alteraron el normal funcionamiento del paìs de forma pacifica, pero con apoyo armado de pequeños grupos a modo de "apoyo táctico"(4). En las gigantescas protestas populares en ese paìs tuvieron especial protagonismo los fedayines-(marxistas leninistas)- y los mojaidines-(partidarios de la revoluciòn islámica). También la dirección del PC realizo, por primera vez un estudio de las desobediencias civiles pacificas al estilo de las de Ghandi en la India, y la mas "nacionalista revolucionaria" de Jawaharlal Nehru, o la la heterodoxa "intifada", desarrollada en palestina en 1987, que supuso una experiencia de retroalimentación, donde la OLP y el FPLP palestinos, también incluyeron mucho de lo aprendido de las protestas chilenas. Mención especial merece también la inclusión de experiencias como las del FNLV en Viet Nam y su política de "lucha de masas". Entre las acciones mas espectaculares del Frente Patriótico Manuel Rodríguez FPMR, brazo armado del PC, estuvo el atentado contra Augusto Pinochet en septiembre de 1986. Aun cuando es verdadera la renovación teórica del PC y su abandono del estalinismo y el leninismo ortodoxos, también es importante señalar que su entrenamiento tanto miliar como teórico-doctrinario fue realizado en Bulgaria, Cuba y especialmente en la Republica Democrática Alemana.

                      FRACTURA DE LA OPOSICIÒN Y LA ASAMBLEA DE LA CIVILIDAD

Las protestas de 1983-84 obligaron al règimen de Pinochet a una apertura al dialogo con la oposición moderada. La protesta del 11 de agosto de 1983-(la cuarta protesta)-, fue una de las que mas marco a la población. Un día antes había asumido Sergio Onofre Jarpa como ministro del interior y con su ingreso en el gobierno marcaba la vuelta de la "derecha tradicional" al gobierno desplazando por un momento al gremialismo, de la misma manera que sucedió con la llegada de Luis Escobar al ministerio de economía en 1984, lo que significo el alejamiento momentáneo de los Chicago Boys de los puestos de economía. En este marco Jarpa abrió un canal de dialogo, solo con sectores moderados de la AD. Esto estuvo a punto de provocar un quiebre al interior de dicha coalición, dado que el sector que acepto negociar con el gobierno comenzó al mismo tiempo a criticar la organización de las protestas. Así la quinta jornada de protestas de septiembre de 1983, tan multitudinaria como la de agosto, pero lejos la mas prolongada-(duro casi cuatro días)-encontraba a la AD dividida(5).

Desde 1983 en adelante el gobierno iba a mantener una política del "garrote y zanahoria", es decir daría muestras de apertura, anunciando una salida democrática, por los canales institucionales que señalaba la constitución de 1980, con golpes de autoritarismo, como el decretar estado de sitio a finales de 1984, para responder a sucesivos intentos de paro nacional.

En agosto de 1985 se elabora un documento político elaborado por monseñor Francisco Fresno denominado "Acuerdo Nacional", que marca un punto de inflexión al interior de la oposición política y social. En este documento se vislumbran varias de la pautas que luego mercarían la salida pactada a la democracia. La AD abandono su exigencia de renuncia a Pinochet  y la aspiración de llevar a cabo una asamblea constituyente. La elaboración del documento se llevo a cabo sin la participación de las actores que protagonizaban las protestas, y estuvo marcada por una disputa entre la oposición de centro y la derecha.

Especial mención merece en este marco la creación de la Asamblea de la Civilidad, creada en abril de 1986, ya que tuvo su máxima expresión en el paro nacional Convocado por la Central Nacional de Trabajadores, CNT el 2 y 3 de julio de ese mismo año. La asamblea elaboro un documento que se conoció como la "Demanda de Chile", que buscada generar un retorno a la democracia vía movilizaciones sociales pacificas. La asamblea de la civilidad desmonto varios lugares comunes. Por ejemplo la intermitencia de la participación de las clases medias en las protestas: no fue solo en el momento de crisis extrema de 1983 cuando estuvieron presentes las clases medias en las movilizaciones, también en 1986 la AC reunió a varios colegios profesionales, federaciones de estudiantes universitarios y secundarios. Además al AC fue la única instancia donde la Democracia Cristiana y el Partido Comunista se unieron  para luchar en contra de la dictadura. El gran error, sin embargo, de esta asamblea fue su sinceridad. Su programa la "Demanda de Chile", estaba elaborado por un grupo de dirigentes de partidos de centro-izquierda y democratacristianos progresistas, que se planteaban en serio un reemplazo del modelo económico neoliberal y la vuelta al estado de los fondos de pensiones-(privatizados desde 1981)- y la estatización de la banca entre otras medidas.

El impacto de la creación de la AC y el éxito del paro de julio de 1986 fue tan grande que capto la atención de la comunidad internacional, especialmente de Estados Unidos y se desato una campaña nacional y foránea para su disolución. El mismo día de inicio del paro, el 2 de julio llegaba a Santiago Robert Gelbart, secretario adjunto para asuntos latinoamericanos del gobierno de Ronald Reagan. El diplomático se reunió con representantes del règimen y de la oposición centrista, principalmente la DC. A estos últimos les exigió dejar de participar en cualquier instancia en conjunto con el MDP y cualquier organización de extrema izquierda, lo que tenia como objetivo lógico acabar con la asamblea de la civilidad. Gelbard les señalo a los representantes de la oposición moderada que "no se podía ir de la mano para construir la democracia con aquellos que pretenden destruirla"(6). La postura de Estados Unidos siempre ha sido la misma, es decir, aislar en todo el mundo a los sectores de izquierda marxista. Sin embargo, en el caso chileno sus intenciones se vieron precipitadas al comprobar la capacidad de convocatoria y movilización que había logrado la asamblea y que gran parte de esta capacidad de debía al trabajo del MDP, al Comando Unido de Pobladores (CUP) y otras organizaciones sindicales afines a el, que incluso estaban a la izquierda del Comando Nacional de Trabajadores (CNT). En concreto el representante norteamericano dejo en claro a la oposición centrista, que de no cesar las relaciones con el MDP, su paìs no abalaría un proceso de transición en Chile.

Teniendo en consideración este caso, seria inexacto adjudicar solamente a Estados Unidos el hecho que la oposición centrista abandonara las las movilizaciones sociales y le quitara su apoyo a la AC. Mucho antes de 1986 en sector conservador de la DC ya había resuelto quitarle el apoyo a las movilizaciones sociales y negociar una salida pactada a una democracia tutelada con la dictadura. Así mismo son cuestionables las versiones que argumentan que la movilizaciones contra el règimen fracasaron definitivamente durante el paro de julio de 1986, debido a que no logro el derrocamiento de Pinochet, dado que el paro de julio no perseguía el fin de la dictadura, sino inaugurar un nuevo ciclo de movilizaciones que hiciera viable el programa económico y político de la AC y evitar la salida pactada y el itinerario estipulado en la constitución de 1980. Finalmente no solo los sectores conservadores de la DC abandonaron las movilizaciones, sino los sectores de la renovación socialista y el Partido Radical Social Demócrata, terminarían quitándole su apoyo a la AC y adhiriendo al itinerario de transición propuesto por el règimen militar.











                                  CRONOLOGÌA DE LAS JORNADAS DE PROTESTA

El esquema de análisis que se usa para el periodo comprendido entre el 11 de mayo de 1983 y el 6 de noviembre de 1984 atiende principalmente dos factores: 1)-quienes realizan la convocatoria y 2)-los sectores que participan. Esto no significa que sean los únicos factores a tener en cuenta ya que aquí también se tienen en cuenta las respuestas del gobierno, las formas de lucha-(en especial cuando se estrena la lucha armada)-y los momentos en que un nuevo sector entra en escena, aunque estos últimos factores serán reseñados cuando sea necesario.

Primera protesta: 11 de mayo de 1983: Es convocada por la poderosa Central de Trabajadores del Cobre (CTC), hace el primer llamado a una paro nacional de trabajadores, dada la aguda crisis económica que atraviesa el paìs. A pesar de que el llamado a paro no tuvo éxito, la convocatoria deriva en la expresión publica de descontento mas grade en diez años de règimen militar y supera las expectativas de todos, incluidos los organizadores. Al tener la primera protesta un convocador de peso histórico en Chile, muchos sectores descontentos pero temerosos adhieren a la movilización incluida la clase media, buena parte de la cual había apoyado el golpe de 1973. Esta primera movilización es tan multitudinaria e incluye a tantos sectores que fue imposible para los medios de comunicación censurarla o acallarla. Fue una de las primeras ocasiones en que una movilización reunió a trabajadores del cobre y jóvenes de las poblaciones periféricas de Santiago. Se argumenta de esta protesta que cambio la correlación de fuerzas en Chile. También se crea el Comando Nacional de Trabajadores CNT.
Convocantes: Central de trabajadores del Cobre CNT, (rebajada de paro a protesta social por diferencias con la Unión Democrática de Trabajadores, UDT de tendencia centrista).
Sectores que actúan: trabajadores del cobre, bancarios, estudiantes universitarios, pobladores, la clase media, -(incluida mucha del sector oriente de Santiago)-, la ciudadanía en general, que de nuevo hace sonar las cacerolas.

Segunda protesta: 14 de junio de 1983: Se amplifica la protesta y es reconocida como hecho político por todos los sectores incluido el régimen, aun así fracasa la convocatoria a paro nacional.
Convocantes: Comando Nacional de Trabajadores
Sectores que actúan: trabajadores del cobre, trabajadores del carbón, estudiantes universitarios de Santiago, Valparaíso, Concepción y regiones, pobladores de Santiago y todas las provincias, sectores de clase media y publico en general.

Tercera protesta: 12 de julio de 1983: El sindicalismo fuertemente golpeado sede su lugar en la protesta a los partidos políticos. La tercera protesta es convocada por el grueso de la oposición-(integrada por los firmantes del manifiesto democrático)-adhieren el comando nacional de trabajadores, los partidos políticos y diversas organizaciones. A partir de estas protestas la convocatoria se desliga del sector sindical, para pasar a ser expresión de la oposición a todo nivel: político, partidario-popular y poblacional.
Convocantes: partidos políticos, organizaciones sociales y comandos de protesta.
Sectores que actúan: exactamente los mimos que en la segunda protesta, pero con la irrupción de combates armados.

Cuarta protesta: 11 y 12 de agosto de 1983: Esta fue sin duda la protesta mas grande de ese año. Fue el punto máximo de la crisis económica y al mismo tiempo el punto mas alto de la etapa de ebullición de la protesta en todo Chile. Su alcance y extensión fue tal, que de muchas partes del extranjero llegaron, reporteros de medios de comunicación, para tener la primicia de la caída del règimen que parecía cuestión de días o meses. Esta movilización es también la primera en la que participa la Alianza Democrática, formada por la DC y sectores renovados del PS. Fue la AD, la matriz de la cual surgió la concertación. La protesta es ya política y se comienza a visualizar una marcada distancia entre la dinámica popular y las representaciones políticas nacionales. La protesta se extiende por varios días en las poblaciones periféricas y se desliga de la organización de la AD. El ministro del interior ya es Sergio Onofre Jarpa, quien representa a la derecha tradicional y un ala mas negociadora con la oposición. Sin embargo le règimen saca mas de 18.000 efectivos del ejercito en Santiago, una cifra récord.
Convocantes: Alianza Democrática y CNT convocan para el 11. Izquierda y convocatorias locales para el 11 y 12.
Sectores que actúan: Los mismos que en la tercera protesta, incluso se suman mas capas de la clase media y se extiende aun mas a provincias.

Quinta protesta: 8,9,10 y 11 de septiembre de 1983: El gobierno inicia una política aperturista con el objetivo que la AD no convoque a esta quinta protesta pero la estrategia no resulta. Con la entrada de Jarpa al gobierno reaparecen rasgos de la política tradicional en el règimen que no se veían desde hacia diez años y disminuye la presencia militar en las calles. La AD figura como conductora y con un proyecto alternativo a la del gobierno militar, ya que hasta ese momento exige la renuncia de Pinochet y elecciones libres inmediatas. Sin embargo la coalición opositora expresa sus criticas a la forma de las protestas y las movilizaciones comienzan a "autonomizarse" de la AD. Durante esa semana se hace evidente que las movilizaciones desbordan a la AD y se pone en el centro la acción poblacional. Las protestas comienzan a trasladarse a sectores periféricos y los jóvenes pobladores comienzan a ser los protagonistas. Al mismo tiempo los sectores de la clase media comienzan a bajarse de la protesta.
Convocantes: Alianza Democrática, CNT y la Unión Democrática de Trabajadores UDT para el 8. La izquierda, y organizaciones sociales y territoriales del 8 al 11.
Sectores que actúan: Participación generalizada, aunque menor en sectores de clase media. Aumenta exponencialmente la participación juvenil, la protesta es nacional, marchas y manifestaciones en todo Chile.

Sexta protesta: 11,12 y 13 de octubre de 1983: La contradictoria situación producida por la coexistencia de diálogo y protesta, unida a la consecuente perdida de capacidad de conducción de la AD, aceleran la constitución de nuevos bloques políticos, el Bloque Socialista (BS)-(con la mitad de sus componentes dentro de la AD y la mitad afuera)-y el Movimiento Democrático Popular (MDP), formado en septiembre y que estaba integrado por la extrema izquierda, el PC, el MIR y sectores del PS Almeida. Es el MDP el que organiza la sexta protesta y con ese objetivo se alía con el PRODEN-(integrado por democratacristianos y derechistas liberales arrepentidos). La concentración resulta exitosa, pero los días siguientes la protesta se reduce a caceroleos en la periferia.
Convocantes: El Movimiento Democrático Popular MDP, debuta en la organización de las protestas y avala toda forma de lucha.
Sectores que actúan: Trabajadores, estudiantes secundarios, universitarios y pobladores jóvenes.

Séptima protesta: 27 de octubre de 1983: El Comando Nacional de Trabajadores retoma temporalmente su papel convocador y es secundado por todos los partidos políticos. La protesta es convocada al denegarse el permiso para una concentración. La movilización experimenta un repunte de participación con respecto a la sexta pero no alcanza los niveles de agosto y septiembre.
Convocantes: CNT. adhiere la AD, MDP Y BS, además de diversas organizaciones sociales.
Sectores que actúan: Dirigentes sindicales, familiares de detenidos desaparecidos, universitarios y pobladores jóvenes.

Noviembre de 1983 a marzo de 1984: Del fracaso del dialogo a nuevas protestas: Comienza una coyuntura que estará marcada por todas las formas de lucha. Al fracasar el dialogo del gobierno con la oposición moderada, no solo recrudecen las protestas, sino que además comienza a verse en el horizonte la posibilidad de organizar un paro nacional. La propuesta no estaba tan lejos de la realidad, mas si se tiene en cuanta que incluso los sectores empresariales criticaban ya abiertamente la conducción económica de los Chicago Boys y el propio Pinochet sacaba a este equipo económico del gabinete y llamaba a Luis Escobar al ministerio de hacienda y a Modesto Collados al ministerio de economía. El primero había sido ministro de economía de Jorge Alessandri y el segundo ministro de obras publicas de Eduardo Frei Montalva y representaban una lìnea mas pragmática que la representada por lo Chicago Boys al punto que bajo sus administración al frente de los ministerios, el estado volvió a intervenir en la economía por primera vez en diez años haciéndose con el 80% del sector financiero. Además de un nueva generalización de las protestas se hicieron mas notorias las acciones armadas, primero del FPMR y posteriormente del Movimiento Lautaro.

Noviembre de 1983: Entre los convocantes además están los trabajadores del los programas de absorción de mano de obra cesante creados por el gobierno PEM Y POJH
Sectores que actúan: trabajadores del PEM y el POJH, trabajadores del cobre, organizaciones sociales, colegios profesionales y publico en general.

Enero y Febrero de 1984: Sectores que actúan: publico en general, trabajadores del cobre, estudiantes universitarios, dirigentes sindicales, pobladores y conglomerados políticos.

Marzo de 1984: Sectores que actúan: Participación generalizada de jóvenes pobladores, intensificación de las acciones armadas del FPMR, dirigentes sindicales y mujeres profesionales.

Octava protesta: 27 de marzo de 1984: Esta protesta se caracterizo por su amplitud, en la medida que fue capaz de articular a sectores representantes de las clases medias, principalmente a los gremios, así como la creciente radicalidad que adquirió en los sectores poblacionales. Su alcance fue tal que paralizo todas las actividades en Santiago. El règimen, cada vez mas aislado, recurrió a una formula ya conocida: represión masiva en los sectores populares por una parte y concesiones y negociación con los sectores de clase media por la otra. El general Pinochet recorrió la cuidad en helicóptero para enterarse de la magnitud de la protestas. Después de esta movilización, Pinochet realiza el ya reseñado cambio de gabinete, distanciándose de los economistas de chicago y acercándose a la derecha tradicional que era mas pragmática y estaba en mejores condiciones de negociar con el sector empresarial y la clase media. El CNT comienza a debatir la fecha de un posible paro nacional.
Convocantes: CNT, bloques políticos, AD Y BS, organizaciones sindicales: UDT-(anticomunista) y el Frente Unido De Trabajadores, brazo sindical del MDP-(de extrema izquierda)-, camioneros, taxistas, comercio detallista, sector educacional.
Sectores que actuan: Padres y apoderados de educación básica y media, comercio detallista, choferes y pequeños empresarios, estudiantes universitarios, juventud popular y pobladores, acciones armadas del FPMR.

Novena protesta: 11 de mayo de 1984: Fue de escaza masividad y se realizo principalmente para conmemorar un año de la primera protesta. Los sectores medios se bajaron de la movilización, esperanzados en que el cambio de gabinete hecho por Pinochet y el alejamiento del las políticas económicas de los Chicago ayudarían a resolver sus problemas.
Convocantes: CNT, AD, MDP, BS, profesores y estudiantes.
Sectores que actúan: padres y apoderados de enseñanza básica y media, estudiantes universitarios, jóvenes pobladores, aparatos armados del FPMR y profesores.

Mayo a agosto de 1984: El fracaso de la concertación: Comienza la búsqueda de un paro nacional y de una salida a la dictadura. Sin embargo la central sindical mas influyente, el CNT tiene un importante presencia democratacristiana en su directiva. La DC especialmente en ese momento comienza a privilegiar su negociación con la derecha moderada. Se realiza la jornada por la vida, que según se ha dicho marcara un punto de inflexión en la protesta, ya que se empieza a observar lentamente como se termina la etapa de ebullición y comienza una de repliegue. Aun así, cuando el gobierno se niega a negociar los plazos fijados en la constitución y se aferra a su duración hasta 1989, las movilizaciones vuelven a estallar.

Mayo-julio de 1984: Sectores que actúan durante esos tres meses: Algunos mineros del cobre, colegio de periodistas, jóvenes pobladores, aparatos armados del FPMR y El Movimiento Juvenil Lautaro, -(con participación y apoyo de pobladores)-, organizaciones poblacionales y políticas con apoyo de la población en general.

Jornada por la vida: 9 de agosto de 1984: Convoca la iglesia católica y la manera de protestar se hace en forma simbólica con cantos a determinadas horas del día.

Agosto de 1984: convoco la Alianza Democrática

Decima protesta: 4 y 5 de septiembre: Convocantes: la AD, MDP, BS, y El CNT.
Sectores que actúan: Apoderados de educación básica y media, estudiantes universitario, sectores sindicales y políticos de la oposición, pequeños comerciantes y locomoción colectiva pobladores y una parte de la clase media.

Septiembre y octubre de 1984: Sectores que actúan: Pobladores de la victoria, universitarios, estudiantes del INACAP, dirigentes sindicales, obreros del POJH, pobladores, grupos armados-(FPMR. y Lautaro)-, y debutan en esta fecha en las protestas, los estudiantes secundarios.

Decimo primera protesta: 29 y 30 de octubre de 1984: Es en esta jornada donde por primera vez se visualiza la posibilidad de una protesta-paro. Los efectos de septiembre provocaron que la movilización se intensificara y profundizara sectorialmente. Se profundizo la recuperación de la FECH, por parte de los estudiantes universitarios, pobladores de Puente Alto reactivaron después de muchos años las tomas de terreno. Ganan además, cada vez mas notoriedad las acciones de propaganda armada del FPMR.
En este contexto la oposición gano iniciativa y el Comando Nacional de Trabajadores convoco a un paro nacional para el 30 de octubre.
La izquierda-el MDP y el BS- fue partidaria de una protesta previa el día 29 para lo cual activo el comando de movilización. El paro altero muchas ciudades de Chile, y alcanzo su máximo nivel el día 30 de octubre, incorporándose a el diversos sectores entre ellos los trabajadores organizados. Sin embargo fueron nuevamente los pobladores los que alcanzaron el máximo protagonismo. A pesar de la situación de ingobernabilidad que reinaba en el paìs la oposición dividida no logro proyectar políticamente la protesta.
Convocantes: CNT que en acuerdo con diversas organizaciones sindicales lleva adelante el paro nacional. También participan y adhieren el MDP y el BS. La UDT se opone la paro y la AD solo solidariza con la movilización.
Sectores que actúan: Pobladores, estudiantes de todos los niveles, empresarios y choferes de la locomoción colectiva, comerciantes, trabajadores del área textil, metalurgia, construcción, mediana minería y el carbón(7).



















  

                                                             BIBLIOGRAFIA

(1)-Peter Woldsey, "FRANZ FANON Y EL LUMPEN-PROLETARIADO", 1972. (*)(en el que se pone de relieve si en los paises del tercer mundo es el obrero industrial el que puede ser el agente de cambio-como sostenían las tesis de Marx-o es el lumpen-proletariado el que tiene, por su numero mayor en los países del tercer mundo, mayor relevancia). Ver también: Weinstein José. "Los Jóvenes Pobladores en Las Protestas Nacionales (1983-1984), Una visón sociopolítica". CIDE, octubre de 1988.
(2)-Tomas Moulian y Pilar Vergara. "ESTADO, IDEOLOGIA Y POLITICAS ECONOMICAS EN CHILE 1973-1978". Colección de Estudios CIEPLAN, Nº3, junio 1980.
(3)-Graciela Lunecken. "VIOLENCIA POLITICA.(Violencia Política en Chile. 1983-1986), trabajo de tesis. profesor guía: Alfredo Riquelme Segovia, enero 2000.
(4)-Verónica Valdivia Ortiz de Zarate, Rolando Alvares Vallejos, Julio Pinto Vallejos. "SU REVOLUCIÒN CONTRA NUESTRA REVOLUCIÒN, IZQUIERDAS Y DERECHAS EN EL CHILE DE PINOCHET 1973-1981". LOM Ediciones, 2006.
(5)-Antonia Garcés Sotomayor. LOS ROSTROS DE LA PROTESTA, ACTORES SOCIALES Y POLITICOS DE LAS PROTESTAS CONTRA LA DICTADURA MILITAR (1983-1986). Tesis para obtener el grado de Licenciatura en Historia, profesor guía: Rolando Álvarez vallejos. Universidad de Santiago de Chile. Facultad de humanidades, Departamento de historia. Santiago, Chile 2011.
(6)-Cristopher Manzano. "LA ASAMBLEA DE LA CIVILIDAD, MOVILIZACIÒN SOCIAL CONTRA LA DICTADURA EN LOS 80". Colección Pasado Presente, Londres 38, espacio de memorias, noviembre 2014.
(7)-Gonzalo de la Maza, Mario Garcés. "LA EXPLOSIÒN DE LAS MAYORIAS. PROTESTA NACIONAL 1983-1984". ECO, Educación y Comunicaciones, Nº63, diciembre 1985.



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